Las reparaciones
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Lo que pasa con la reparación de ropa es que nunca termina. Esto es a la vez frustrante y reconfortante. Muchas veces, termino una reparación, haciendo los puntos cuidadosamente para cubrir un agujero, e inmediatamente abre uno nuevo al lado de la reparación. Pero sí me gusta tener las manos ocupadas, y con las reparaciones nunca estoy sin un proyecto.
Cuando empezaba a ver reparaciones visibles de otras tejedoras y artistas sentí que me estaba perdiendo porque no tenía ropa que necesitaba reparación. Luego dejé de comprar moda rápida y me propuse usar la ropa que tenía por lo más tiempo posible, y eventualmente tuve un agujero en mis jeans, la tela casi transparente. Hice un parche y lo cosé cuidadosamente, un acento bonito en la tela del pantalón. Pensé que ya había terminado con las reparaciones por un tiempo.
Pero mientras sigues usando una prenda, las reparaciones nunca realmente terminan. En algún momento me di cuenta que no podía colocar más parches en el interior de los jeans porque ya no quedaba espacio y empecé a aplicarlos por encima. Ahora sospecho que tienen más parches e hilo de bordado que la tela original. Pero ahora por la inversión de tiempo y trabajo que representan, son aún más mis jeans favoritos. Representan un proceso de más de dos años, quizás ya un poco ridículo pero ya no puedo parar. Me siento orgullosa de usar esta representación visual de mi proceso.
La simplicidad e ingenuidad de las herramientas de reparación conecta mi práctica hoy con la historia de la fabricación de textiles. Los seres humanos han usado aguja e hilo por miles de años. No es necesario tener nada más que la aguja y un hilo para reparar la ropa pero el mini telar que uso para reparar calcetines es muy útil. Hace que los parches se vean más parejos y en general hace que el proceso de reparación sea más fácil y divertido. Las herramientas me recuerdan que quiero trabajar más lento, disfrutar el proceso. Quiero reparar un calcetín, pero también quiero cambiar mi mentalidad, dejar de pensar que las cosas son desechables y encontrar nuevas maneras de relacionarse con las cosas que no involucra comprar. Cuando me quedo con mis cosas por más tiempo, evito que terminan en el vertedero. Ese cambio en mis costumbres, mi estilo de vida, es igual de importante que el calcetín arreglado.
Reparar mi ropa, ya sea hecha por mi o comprada en tienda, me recuerda que toda la ropa está hecha por personas. Es un trabajo experto que requiere atención a detalle, un trabajo digno y valioso, hecho en casa o en una fábrica. Hoy en día, la mayoría de la labor de producir textiles y ropa es invisible para los consumidores, pero históricamente era integrado con la vida cotidiana, a la vez más prosaico y más precioso porque la labor era visible, hecha por uno mismo o por seres queridos. Hoy en día reparar la ropa es una manera de honrar la labor detrás de ella, aunque una gran parte de esa labor fue hecho en una fábrica en otra parte del mundo.
No siempre ocupo tintes naturales en mis reparaciones, uso los restos de otros proyectos y trato de combinar la misma fibra y grosor. Pero el teñido natural también me permite pensar en la ropa como parte de un ciclo, algo que siempre seguiré trabajando, reparando, tiñendo y re-tiñendo, durante su vida útil. En el pasado, cuando todos los tintes eran naturales, las personas entendían que los colores se destiñen y cambian a través del tiempo, y que ciertos colores, aunque eran muy bellos, solo perduran por un tiempo limitado. Re-teñir fue una parte del trabajo de cuidar la ropa. No quiero fantasear con esa época- realmente fue mucho trabajo y no creo que tenemos que volver a un estilo de vida preindustrial. Pero el sistema actual de sobreproducir y botar la ropa está matando el planeta, y por eso vale la pena preguntarnos qué podemos hacer de otra manera.
Algunas artistas cuyo trabajo con reparaciones textiles me inspira:
Estás reparando alguna prenda? Me encantaría que me cuentes en los comentarios!
Noticias
Ya se viene la Expo Teje Primavera el 4-5 de noviembre! Estaba muy triste que perdí la versión de invierno y estoy muy feliz de volver ahora. Espero que nos veamos en Santiago!
Hablando de las herramientas sencillas que perduran por la historia, estoy usando mi niddy-noddy para hacer mini madejas. Tengo de 10 gramos y 25 gramos y estarán disponibles en la Expo Teje y están disponibles ahora. Ideal para reparaciones o punto duplicado, o proyectos pequeños de jacquard (yo prefiero los cuellos y los guantes sin dedos).
Gracias por leer! Hasta pronto,
