Energía de otoño y el teñido con hielo
Una técnica muy fácil para inspirarte en el color natural
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Aunque el tinte natural forma parte de mi práctica creativa y de mi vida desde hace varios años, a veces caigo en la rutina. Especialmente si guardo todos mis ollas de tinte y materiales de forma ordenada, luego me hace difícil vencer la inercia y empezar un proyecto potencialmente desordenado. Esta es una batalla constante para mí con la vida en un departamento... Quiero que mi pequeño espacio esté limpio y ordenado, pero también quiero tener un montón de trabajos creativos en curso y esos dos objetivos están siempre en desacuerdo.
Este año, el verano fue un bajón creativo para mí. Antes pensaba en el verano como mi estación de alta energía en Chile - los días en Viña del Mar no son muy calurosos, y las largas horas de sol significan más tiempo para estar de pie haciendo cosas. Pero también me he vuelto más sensible al sol y la forma en que golpea a través de la ventana de mi sala de estar (que es también mi lugar de trabajo para todo lo que no requiere agua o calor) durante estas largas tardes hace que sea difícil hacer algo, incluso los proyectos que realmente quiero hacer.
El otoño, sin embargo, se ha convertido en una estación de energías renovadas. Hay muchos días que no son tan fríos como para querer quedarme bajo las mantas, pero el sol no es tan intenso como para empezar a sentirme mal. Así que, aunque mi trabajo aumenta en otoño, cuando empiezan los días más cortos y el sol de la tarde se vuelve menos intenso, empiezo a buscar formas de volver a incorporar el teñido natural en mi vida.
Este año, quería empezar con algo fácil, que no ocupara demasiado espacio ni creara un gran desorden, pero que igual sería algo nuevo y creativo y me permitiera jugar con un montón de colores diferentes. Quería probar el teñido con hielo desde que vi esta sesión de Feedback Friday con Cara Marie Piazza y fue exactamente lo que buscaba.
A pesar de que no estuve produciendo mucho creativamente durante el verano, el teñido natural nunca está completamente fuera de mi mente. Pasé por algunas tiendas de segunda mano en busca de ropa blanca o sin teñir y encontré un montón de opciones en seda y algodón. (Esto me sorprendió, ya que mis opciones locales de segunda mano no son realmente de gama alta, pero resulta que todavía hay mucha seda por ahí!). Empecé con una camiseta de seda larga y vaporosa con los laterales abiertos.
El teñido con hielo es ideal cuando no tienes mucho espacio ni tiempo, ya que no requiere mucho equipo ni espacio de trabajo, utiliza poca agua y nada de calor y, una vez preparado, puede dejarse sin tocar hasta que esté listo. Funciona mejor con flores congeladas, extractos de tintes naturales o cubitos de hielo de tintes naturales. Para la camiseta de seda, utilicé flores de oxalis congeladas y extracto de rubia, luego agregué unas gotas de limón, carbonato de sodio y una pequeña cantidad de sulfato de fierro para ampliar la gama de colores. Oxalis da un amarillo neón cuando el tinte es ácido y anaranjado brillante si el pH se aumenta hasta 6 o 7. Rubia da tonos más anaranjado con el ácido y con un pH más alto los verdaderos rojos y rosados. Con el sulfato de fierro, el color de oxalis se vuelve verde olivo y el de la rubia, morado.
Remojé la camiseta por un par de horas antes de teñir, puedo también se puede comenzar con tela seca (el resultado final será distinto). Para teñir, simplemente coloca la tela en un colador (sobre una olla u otro recipiente), rociar con todos los tintes y modificadores de color, y cubrir con una capa de hielo (o nieve, si estás en un lugar con nieve). Y luego solo tienes que esperar! Es mejor hacer esta técnica en un día fresco, fuera del sol, porque cuanto tiempo más tarda en descongelarse el hielo, mejor será el resultado. Yo lo deje por la noche. El efecto final es como acuarelas, con los colores más difusos que en el estampado, creando un efecto suave y abstracto.
Seguí con mis experimentos con el teñido de hielo con unos pañuelos de seda que estoy preparando para la Expo Teje y hice unos cubitos de hielo de tintes de peumo, rubia, yerba mate, oxalis, y cochinilla (estos tintes me sobraban de otros proyectos, pero también podrías hacer mini baños de tinte para congelar en cubitos). Aquí logré un efecto marmoleado, muy distinto a cualquier otra técnica de teñido que he probado.









Para probar el teñido de hielo, necesitas:
un colador
una olla u otro recipiente para recolectar el líquido descongelado
bandejas para cubitos de hielo (opcional)
textiles de fibras naturales, lavados y mordentados
materiales tintóreos: flores congelados, extractos de tintes naturales y/o cubitos de hielo de tintes naturales
modificadores de color: juge de limón, bicarbonato o carbonado de sodio, sulfato de hierro
Remojar la tela y colocar en el colador. Rociar con los materiales tintóreos y modificadores, asegurándote que están distribuidos por toda la tela. Si no estás usando cubitos de hielo de tintes, agregar hielo encima de la tela. Espera hasta todo el hielo se descongele (dejar en un lugar fresco para que el proceso sea más lento). Enjuagar y colgar para secar.
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Se viene la Expo Teje los días 4-5 de mayo! Voy a traer pañuelos de seda teñidos con hielo y con estampado botánico, nuevos speckles naturales, y un arcoíris completo de colores naturales en lana chilena.
Gracias por leer! Espero volver a enviar boletines con más regularidad ahora que me siento más inspirada, pero este año trae muchas cosas para mi, así que ya veré cómo va. Me encantaría conocer tu opinión o ver tus proyectos, especialmente si pruebas el teñido sobre hielo! Puedes dejar un comentario al final de este post o responder al correo electrónico.